Lo primero que me viene es una frase conocida, es Zen o Budista no sé – Al principio los ríos son ríos, las montañas son montañas y los valles son valles, después dejan de ser ríos, montañas y valles para pasar después a ser lo que eran ríos, montañas y valles-
La Inseguridad te permite que vuelvas donde empezaste cuando somos niños, vemos, no pensamos, después de “adultos” pensamos pero no vemos.
Intentaré aclarar o liar más todo esto.

Desde mis 46 años de experiencia como persona y más de 20 años como terapeuta de bastantes disciplinas en busca de la seguridad: homeopatía, masaje, quiropraxia, shiatsu , osteopatía craneal, terapia craneosacral….siempre buscando y creyendo que si aprendía algo más podría ser mejor, podría tener más éxito con los pacientes y a pesar de que siempre he estado satisfecho con los resultados, me quedaba un sabor que no terminaba. Y un día tope con esto que entonces se llamaba trabajando con la inseguridad, ah, esto es lo que necesitaba pero cual fue mi sorpresa que lo primero que Mike dijo – si creéis que os podéis librar de la inseguridad, es imposible- vaya! esto tiró por el suelo mi expectativa y a la vez me puso muy alerta.
A partir de esto hace 7 años creo que he podido aprender a tener una práctica compartida con la Inseguridad. Esto me permitió darme cuenta que este trabajo es una Bendición, como ahora se le llama y lo puedo llevar al día a día como persona y trasladarlo al trabajo como terapeuta, como pareja, como padre…
Desde lo que a mi me toca como terapeuta y profesor puedo darme cuenta de que las técnicas no importan en absoluto, no hay una técnica mejor que otra no importa que nos manipulen una vértebra, que nos pongan agujas, que trabajen con cualquiera de las mareas… no, no tiene mayor importancia. Todo método es como una barca, la barca que hemos utilizado para llegar a la otra orilla del río; sería muy absurdo que como nos ha sido útil, después de cruzar el río cargáramos con allá a cuestas.
Este trabajo es un soltar, soltar todo método, soltar, soltarte a ti con todo lo que tú has creído que eres.
Entonces la Inseguridad se vuelve un Bendición y cada persona que entra en práctica compartida contigo puede ser escuchada desde la Quietud –por cierto la mayoría de las veces mal entendida- y la persona puede recordar quién es por debajo de las capas y capas de experiencia de vida no digerida. Si puedo tocar ese lugar en mí y desde el entrar en contacto, hay una gran posibilidad de una transformación profunda, pero aún así, no podemos estar seguros de que vaya a pasar algo.
Mi trabajo es intentar apoyar y dar a conocer este enfoque a la gente, que les suene o sientan cierta resonancia con este trabajo desde la Quietud.

Carles